Seguidores

lunes, 4 de julio de 2016

El inmenso vacío




El dolor y la necesidad de sentirse deseado llegan a niveles sorprendentes. Tan elevados, que solo muestran el tamaño del vacío dentro de ti.

Es tan grande esa necesidad de seducir, de filmar, de documentar cada encuentro sexual, que muestra el grado de angustia y compulsión por sentirse "amado" dentro de ti.

Porque hay algo que crees cierto y no ves la falacia: lo que tú buscas es "amor". Crees que eso es amor. Confundes el amor con el deseo, la seducción y con el acto sexual. El amor es entregarse al otro y preocuparse por su bienestar. Y en tu caso, cuando la máscara cayó, cuando fuiste descubierto, mostraste tu verdadero rostro: no quiero lidiar contigo, no quiero escuchar tu dolor, no quiero que me confrontes, no quiero saber nada de ti. Porque en realidad no me importas, solo eres el vehículo de mi placer. Porque no siento nada por ti, porque el amor no vive en mi, no me preocupas, solo me preocupa la vergüenza de haber sido descubierto. Es un alivio que me hayas pedido que no te vuelva a buscar. Porque de esa manera me evito la responsabilidad de lidiar contigo.

No te preocupa si en el proceso me pusiste en riesgo. No te importa si me contagiaste con algún virus. Porque lo único que importaba era aliviar ese vacío, intentar llenarlo con mujeres, una tras otra, todas engañadas, todas devaluadas ante tus ojos. Porque cuando fuiste confrontado, intentaste volcar tu culpa en mi: tú eres casada y me aceptaste... Si te acepté, pero fue en gran medida por tu habilidad para seducir. Porque sabes detectar el posible vacío que determinada víctima tuya está padeciendo, para llenarlo con tu presencia virtual. Yo NO te busqué. Yo NO te seduje. Yo NO te mentí. Ni una vez. Por más dolorosa que pudiera ser mi situación para ti, nunca la oculté. Nunca te dije que estaba en un lugar o con una persona, cuando estaba con otra. Yo NO te engañé. NUNCA.

El nivel de maldad, de perversión, es inmenso. Porque tú de antemano sabes que solo estás jugando. Tú sabes la verdad y no te importa. Sabes que nunca te entregarás, sabes que después de utilizar a una, correrás con la siguiente. Todas tus relaciones están construidas sobre mentiras.

¿Qué pasará el día que te descubran? No te importa porque en realidad solo te importa el hoy. Tu placer y tú emoción. El dolor de las demás no te importa. No hay mujeres suficientes que puedan llenar el vacío dentro de ti. Y eso es algo que tarde o temprano vas a descubrir.

sábado, 2 de julio de 2016

Hace un año



Hace un año
Quieres a la que vive dentro de ti, a la que has creado con tu mente.

Tu amor es solo un reflejo de tus deseos sueños y aspiraciones. Lo mío que hay dentro de ti es una construcción de tu percepción de mi.

Tu eres solo una voz que sale de mi mano

En ti reflejo mis vacíos. Lo nuestro está construido por palabras, por deseos, por pensamientos, no por presencias, olores o sensaciones.
Es intangible. Por lo mismo es increíblemente frágil y limitado.

Las frases construyen presencias que solo viven dentro de mi
Tu poesía es solo para ti, no es un instrumento de seducción, es una racionalización egoísta de tu interior
No.
No hay donde poner un mensaje.
No hay un destinatario.
No hay alguien a quien le interese.
No hay un lugar donde depositar este dolor.
No se puede gritar, ni decir, ni mostrar.
No se puede llorar.
Estoy bloqueada porque la única razón por la cual no lo estaba ya no existe.
No hay algo bueno en mi, ni amable ni positivo que me haga digna de recibir consuelo o piedad.
No hay más que desprecio hacia mi. Una vez que fui utilizada no sirvo más, no soy reservorio ni recipiente de compasión.
Mis ojos están rojos de contenerse.
Corre, refúgiate en los brazos de esa masa amorfa y comunitaria que percibes como el ente femenino. La mujer es un conjunto de vaginas indistintas, que se utilizan una tras otra sin ninguna particularidad o predilección. 
Solo en mis sueños eres bueno, me quieres y te importo.
Esa persona que pensé que eras solo estuvo en mi mente. Nunca existió.
Y mis sueños solo están adentro de mi. 

El día que el miedo se acabó

10 febrero 2015
El día que el miedo se acabo.

¿Es el día en que me desconecté de mis sentimientos y mi dolor?
¿Es un mecanismo de defensa?

¿Alguien chocó? ¿Alguien se enfermó? ¿No se pagó la tarjeta? ¿Alguien reprobó? 

Nada me da miedo.

Todas esas cosas son puras tonterías, en realidad no dan miedo ni son problemas.

¿Te vas a morir? Es cierto, y yo también. Todos nos vamos a morir, unos más lentamente y con más dolor que otros. Y todo ese sufrimiento no tiene ningún sentido. 

¿Tiene alguna importancia?

Andamos en nuestros coches, en nuestros trabajos, ocupaciones. Y nada importa. Somos un capricho de la evolución con conciencia de nosotros mismos. Pero nada de lo que hacemos, pensamos o sentimos importa para nada.

Nos creemos los reyes de la creación, y solo somos insectos pisoteables.

Y tarde o temprano, todos desapareceremos de esta dimensión 

Esos ojos tristes, eso son: tristes.


Solo 10 palabras


5 febrero 2014
Así empieza y así acaba.
Es sorprendente ver lo poco que se dijo por meses.
Lo mucho que eso significaba en mi mente.
Lo mucho que llenaba mis días, mis semanas, mis años.
La mayoría de las cosas solo estaban ahí, dentro de mi cabeza.
Lo que estaba fuera, la realidad, era nada.
Los viajes, el ir y venir, la falta de contacto.
Los vacíos eran rellenados con ilusiones.
Quimeras, conversaciones, sueños, ilusiones.
Que sólo vivieron en mi cabeza.
Pasaron semanas, meses, años.
Colgados sólo a través de 10 palabras.
Repetidas una y otra vez.
Pero en el fondo solo palabras, sólo eso.
No acciones.
No presencia.
No visitas.
No llamadas.
No compromiso.
Sólo unas cuantas palabras, 10 a lo sumo, repetidas de manera regular de manera escrita a través del tiempo.
Pero vacías.
Las rupturas constantes.
La falta de constancia.
La ausencia de insistencia.
Disforia.
Discordia.
Tu suponías una maldad en mi.
Que a veces surge en tu discurso.
Y que solo es un reflejo de tu interior.
Yo quería hacer el amor con amor.
Y lo logré. O eso creí.
Y lo perdí.
Y ese amor es lo que redimía la situación.
Cuando eso se perdió, se perdió.

Lo único que redimía a esa maldad era el amor.
Al perderse el hacer el amor con amor
Mi maldad fue iredenta.
Por tanto insostenible.



Edad Media

3 marzo 2013
Hay un destello en el espejo.
Brutal que reconozco en cada rostro de mis coetáneas.
Algo de lo que hubo.
Que para el pasado es inescondible.
Pero que para el futuro es novedad.
En la mitad del camino me encuentro y miro para atrás y adelante.
Un largo trecho falta.
Lo mismo que llevo.
Pero el ímpetu es menor.
La fuerza y la belleza también.
Y es cruel lo que falta y lo que queda.
Terrible ver los estragos del tiempo.
Mientras la tersura se resbala por huecos, pellejos pegados a la carne.
Y al hueso.
Lo lleno se escapa.
Como sí la juventud se escapara por un lugar perdido ente la piel y el hueso.
Los nuevos no tienen parámetro.
No intuyen lo que ya no esta.
Sólo ven los rastros.
De lo que alguna vez hubo.
En el destello del espejo.

Presagios

9 septiembre 2012
Hoy esta bien hoy no hay dolor enfermedad ni muerte.
Ayer fuimos felices en el espacio cotidiano
Hoy los fantasmas oscuros te han secuestrado.
Hoy poseo la salud la veo reflejada en mi derredor.
Fútil certeza.
El físico intacto.
El cuerpo entero.
Un niño llora.
Y el débil sonido.
Es ensordecedor en mi mente.
Presagios antiguos devoran.

¿Qué nos depara el destino?

Certeza

28 abril 2012
Encontré dentro de mi la certeza de que nunca podrías amarme toda
Y nunca me sentí lo
suficiente mente segura contigo para poder amarte

patética

1 abril 2011

Es patético observarme perdiendo la razón, sumida en la desesperación, al borde del pánico
El dolor en el pecho es tan real como mis lagrimas y la incapacidad de dejar de sufrir y sollozar en silencio 
¿Qué diablos me pasa?
¿Por qué no puedo dejarlo atrás?
Es una especie de frustración personal
El duelo es peor que el de una muerte porque contra esta no se puede hacer nada y aquí queda la posibilidad de hacer algo para arreglarlo.
Es patético notar que no hay remedio, que las cosas no se pueden forzar, ya se movieron, cambiaron,  y mi dignidad se encuentra por los suelos. He llegado a la máxima humillación y las cosas no se pueden componer con solo desearlo.

otras entradas

Blog Widget by LinkWithin